Los secretos de una mente millonaria, identifica principalmente la definición del rico, el pobre y el de clase media no por el volumen de dinero que posean en su cuenta bancaria, mas bien las grandes diferencias están planteadas en una cuestión de actitud mental, donde evidentemente el autor del best seller, Harry Eker sugiere que pensar como el rico, lleva a actuar como el rico y esta actitud solo atrae más riquezas a la vida de quien tiene, dichos pensamientos.
Más allá del extracto social a cual el individuo pertenezca en el presente, cualquiera puede subir en su escala de status financiero, siempre y cuando siga unas reglas sencillas y modifique su forma de pensar, ya que para Harry Eker, la única diferencia, esta en la actitud mental de cada uno.
Basado en el principio de que los pensamientos generan sentimientos y los sentimientos generan acciones, es fácil deducir que las acciones generadoras de riquezas, proceden de pensamientos de riqueza, en simples palabras, piensa como rico y será rico.